miércoles, 10 de abril de 2013

Aprende a ‘venderte’ para salvar tu puesto

"¿Quién sabe hacer esto bien?" Si la respuesta a esta pregunta es tu nombre debes de estar orgulloso. En tu empresa te consideran una pieza clave para ciertas funciones.

Labrarse una buena reputación no es tarea fácil. Mónica Osborne, consultora sénior de Michael Page, asegura que para que te consideren una persona de confianza en la oficina, "tienes que ser bueno y parecerlo, cuidar tu imagen, saber expresarte, mostrarte humilde y demostrar que tienes potencial". Un ejercicio que debe comenzar analizando quién eres y dónde quieres llegar en tu trabajo.

Marca personal
Se trata de potenciar tu marca personal. Y el mejor recurso para esta labor es la diferenciación. Rosaura Alastruey, directora de Proyectos TIC, así lo cree y advierte, además, que "si nos vendemos como todo el mundo, a través de un currículo normal o únicamente utilizando un perfil de Linkedin, nos va a servir de muy poco". Tenemos que saber llamar la atención, especializarnos en algo para que cuando el jefe piense en quién sería el idóneo para realizar una determinada tarea sea nuestro nombre el que aparezca en su cabeza.

Andrés Pérez Ortega, consultor en posicionamiento personal, resume en cuatro los pasos que tienes que dar si tu objetivo es conseguir un ascenso, una subida salarial o, simplemente, salvar tu puesto de trabajo: "Primero tienes que definir cuál es tu meta dentro de la compañía; después debes diseñar tu oferta personal, es decir, tienes que preguntarte por qué te pagan; el tercer paso es encontrar tu elemento diferenciador, lo que te hace distinto al resto de tus compañeros; y por último, y no menos importante, cuidar la visibilidad. Este cuarto paso obliga a ser proactivo, a ayudar en las acogidas de los nuevos empleados, en las presentaciones, en los boletines, etcétera".

No menos importante es cuidar las relaciones en la oficina. José Manuel Casado, socio fundador de 2C Consulting, aconseja mimarlas, sobre todo aquellas que hayamos cosechado con personas de influencia "porque son los que, al fin y al cabo, toman las decisiones". Casado también recomienda ser realista con nuestras propias capacidades y no prestarse a ciertas tareas para las que no estamos preparados. Desprestigia la marca.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy interesante. Lo que está claro es que no nos podemos quedar estancados. Hemos de saber "vendernos", pero lo que creo más importante es que lo que vendamos sea real.